Sin el sueño de los niños, el mundo dejará de ser mundo. Pues, a pesar de la densidad de este mundo, el sueño y la sonrisa de cada niño (hablando de la infancia del género humano, me refiero con el término 'niño' a esa etapa de la vida del hombre, como especie), sostienen la vida en en este plano.
Sin el sueño de los niños, el mundo dejará de ser mundo. Pues, a pesar de la densidad de este mundo, el sueño y la sonrisa de cada niño (hablando de la infancia del género humano, me refiero con el término 'niño' a esa etapa de la vida del hombre, como especie), sostienen la vida en en este plano.