La escritora Gladys González Arévalo ha querido escudriñar en la novela de Jorge Isaac para descubrir los aires de la música que envuelven a esta obra. Quién hubiera pensado en ello, sino la misma escritora. Volver a esos pasajes en los que siempre la música se abraza a esos momentos de literatura.
*Nota de Análisis LaMancha
PRELUDIO
Quizás la lectura más frecuente que se hace de la obra de Isaacs, sea desde la mirada del romance de Efraín y María, como lo expone Otto Morales Benitez, en Isaacs: su humanística Existencia con motivo del sesquicentenario de su natalicio: *
“Nobles y brillantes inteligencias, han puesto en actualidad la novela “María”. Sobre su romanticismo y sus lágrimas, han llovido adjetivos duros, afirmaciones despiadadas, sentencias inapelables. Y, también defensas encendidas, con palabras de amor ungidas por la devoción sentimental. Todo ello ha agitado el ambiente intelectual, les ha dado colorido a nuestras tertulias. Y las mujeres colombianas han pensado en cómo era de lenta y suspirante la entrega de la ternura y apasionado el sueño de los adolescentes. ¿Estas gentes nuevas, con su amor a prueba de todas las velocidades automovilísticas, entenderán a cabalidad esa pasión sostenida, donde solo triunfa el fervoroso afán del corazón?”
Las vetas de aproximación a la novela, son variadas, al penetrar en la novela de Isaacs, luego de ciento cincuenta años,“María” sigue guardando un innegable misterio y en cada nueva lectura, el libro revela pistas sorprendentes, páginas de poderosa vaguedad, además de episodios de sentido velado, que pasarían desapercibidos si los estudiosos no le profundizaran en su verdadero fondo y la obra se limitara al lector común que sigue el argumento de la mano del escritor, que lo lleva por el sendero de la belleza, del amor, de la naturaleza, y de la muerte…
La supervivencia de las costumbres coloniales en los diferentes aspectos de la vida: la situación social de la mujer en la época, frente a la del hombre la deja ver Isaacs a través de la narración, entre otras, cómo el hombre iba a estudiar y las mujeres de la casa solo aprendían algo con las lecciones de Efraín; estaban dedicadas a las labores “dentro del hogar” prisioneras en El Paraíso. En la escena de la visita de Carlos, “María no se atrevía a cantar” y cómo le interroga a Efraín, si no les ha dado los conocimientos de baile que ellos aprendieron en la capital.
Isaacs publicó la novela en 1867, es decir muchos años después de la abolición formal de la esclavitud en Colombia, que se proclamó por ley en 1851. En medio de ese conflicto de agitación política y social, es donde hay que entender el “fondo real” de la novela de Isaacs. María no es solo ese elogio bello del paisaje caucano, sino un escenario difuso de las negociaciones entre los de arriba, los hacendados y los negros y los blancos pobres. La distancia que existe en la hacienda, entre el mundo de arriba y el mundo de abajo.
Uno de estos temas del sub fondo, entre otros, es el de los negros que les da gran relace con el capítulo de Nay y Synar, o en el del matrimonio de Bruno y Remigia en que parecieran escenas de paternalismo, revelan más sutilezas, y en donde además de mostrar las manifestaciones de la cultura negra, da importante mención al Bambuco entre los negros, de lo cual partieron las hipótesis sobre el origen de este ritmo, y es el más relevante en el tema que nos ocupa de la música en la novela. “María” es un contexto donde tras las letras se esconden seres que cantan, tocan y bailan melodías, detrás de la conmovedora trama.
Las “nuevas lecturas”, que se hagan a la novela deben enfocarse a desentrañar la historia verdadera de la época con sus acontecimientos políticos, sociales y culturales, confrontados con la fantasía que Isaacs devela pero que en cada capítulo hay muchos “trasfondos” que nos muestran cada vez más, no sólo al “verdadero humanista”, sino al real cronista del tiempo en que le tocó vivir, con su entorno que hace parte de la historia del país y todo lo que él quiso dejar entremezclado en su prosa magistral.
Para quienes se aventuren a penetrar en su obra desde esta otra lectura, la de la Identidad Cultural a través de la música, confirmarán que se revelarán tantas, como lectores se decidan a explorar en ella.
¡Subámos entonces el volumen para escuchar las músicas que se entrelazan con los párrafos de la narración!
*Gladys González Arévalo
Muy agradecido por su atinado comentario acerca de "María", obra cumbre de Jorge Isaacs, cuyo contenido transmite el momento histórico en que tuvo lugar tan conmovedora narración.
Gran invitación a escudriñar María con otros ojos. Gracias Maestra por su aporte. Y bueno, felicitaciones a Este sitio por su apoyo al análisis.